martes, 4 de diciembre de 2012

Al soñar

Qué espectáculo más bello se refleja en mis pupilas
mientras me incitas a soñar.
Cómo será me da igual si a tu lado es el día.
Tus ojos me recuerdan a  los de una niña en plena rapiña sabiendo que le caerá una riña.
Perdón por perderme en tu pelo
pero es que ahí busco consuelo
mendigo de amor falto de comprensión saciado de cariño.
Noto que la sangre se sube a la cabeza
y me incorporo
pero noto
que estoy solo
y solo me ilunima una vela.
Noto el tacto del fantasma del pasado
pesadumbroso, pesado, apestando a pasto,
pasto plasmado en pasta y basta ya.
Quiero que salga de mí y olvidar lo acontecido.
Lo he conseguido
 y te quiero decir que te quiero a ti,
a ti amante de Dalí, a ti.
La habitación sigue oscura
y tengo miedo,
a encender la luz me tiento
pero pienso que eso no será mi cura.
Cierro los ojos e imagino tus besos
con mi poca cordura
sacada de una película muda
que no entendió el que la dirigió
y que hace burla a la censura de la inquisición.
La comprensión hizo estragos en mi corazón,
 por su falta mis venas dilató.
Estuve solo rodeado de cientos
riendo mis bromas porque era yo el rey de Roma.
Lo mismo tú, tan sola que no se nota pero lloras.
Lo mismo tú, que enfundaste guantes y tutú.
Lo mismo tú, que pasaste del exilio voluntario
al suicidio premeditado en busca de algún fario.
Tú, que a esta habitación oscura
le diste luz.
Con solo rastrear tu rosto me viene un alud
de veladas nocturnas al calor de la luna.
Luna vacía que no cambiaría por ninguna
de otros citas que se ofrecen con la vista
pero no con los ojos.
La habitación que has iluminado
parece comfortable para un cafre que no sabe qué hacer.
Por la ventana veo en la calle gente inframundana,
también veo fuego pero la noche es fría.
Sé a dónde iría y sé de dónde vengo,
nacido del magma de la vida
y dirigido a tu sonrisa como una bala perdida.
Postrado en la cama sin apenas moverme
pero deseoso de correr y vivir el presente
me paro a pensar pensando que piensas
que pienso en ti a pesar de que eso no puede pasar
porque no se puede pensar en tu persona
puesto que me apasiona tu persona y como
pensé, no se puede pensar siempre en la misma cosa.
Sigo fatigado pero vital
observando al resto desde la última
fila que es el último verso,
y como dije en el primero,
el anterior a la niña,
qué espectáculo más bello se refleja en mis pupilas
mientras me incitas a soñar.

jueves, 15 de noviembre de 2012

I/VI/MMXII

Mi vida es como un verso inacabado
en equilibrio cerca de la muerte
solo me salva tu rostro en mi mente
de este cementerio desolado.

Muchos caminos mi sombra ha andado
deambulando sola a su suerte
solo buscando su reflejo inherte
de tu corazón que no ha despertado.

Su prisión es tu pecho palpitante
que la encadena a tu triste locura,
locura que encierra a la dicha de antes.

Dicha que se hunde con el mar cambiante
provocante de veladas oscuras
que me arrastran a tu mundo distante.

sábado, 3 de noviembre de 2012

El tren del pueblo digno.

Subí al tren deseando que descarrilara. 
Vi a Inocencia en el andén y me pregunté qué pensara
 si supiera que niños mueren de hambre y nadie dice nada.
 Si supiera que no hay nada que el dinero más valga. 
Si supiera que solo subí por ver su cara. 

 Miré a un lado y a otro y abrí los ojos. 
Observé más allá del "prohibido fumar" y del reposabrazos roto. 
La verdad se abrió a la vez que mis párpados de loco.
 La mujer de enfrente me echó una mirada a modo grosso 
a lo que yo la miré y le susurré: "mentalmente no estoy cojo".

 Me levanté y el revisor dijo que me sentara, 
hice caso omiso y seguí mis andadas. 
Fui a la cafetería donde la felicidad me embriagaba. 
Nadie parecía triste, todos hablaban de fútbol y cosas mundanas.
 Me recordaron a Inocencia, pero ellos miraban a otro lado porque les daba la gana. 

El tren siguió su camino lleno de lodo 
cuando de repente se apagó todo
 y me di cuenta de que no quería que cesara el coro 
de gente gritando y repitiendo como loros. 
Yo les escupí: "no quiero ser como vosotros".

 Finalmente el tren llegó a su parada
 pero yo en vez de bajarme arreglé la lámpara
 del pasillo en el que a oscuras robaban. 
El revisor se acercó y me obligó a que parara 
alegando que por el servicio de vigilancia dinero sacaban.

 Mis pupilas se encendieron como el magma,
 imaginé mil formas de matarle con mis manos solo. 
Conocí lo que llamaban rabia justificada
 y versos comenzarion a escribir mis poros.
 Ya no me interesa el destino, solo sentirme al abrigo del tren del pueblo digno.

lunes, 15 de octubre de 2012

El por qué de los sentimientos.

Me despedí de su aliento
por última vez,
me dirigí a mi asiento
tras ver su sonrojada tez.

Y no erro ni miento
al decir que hay mil por qués.
Porque la quiero y la amé
porque su estela brilla en el firmamento
pero en el suelo tiene los piés.

Porque es el aire que sopla el viento,
 porque es la luz que no ves,
porque es única entre cientos,
porque en mi corazón ha apretado un corset.

Lo cierto es que es rara como su gato,
pero tranquila y guapa.
Como dijo Neruda, en un beso sabrás lo que he callado.
Atentamente para ti, mi amada,
te quiero, chica rara.

sábado, 11 de febrero de 2012

Magia fugaz.

Bendita magia que nos hace sufrir.
Benditos los temores a los que nos enfrenta.
Bendita magia, bendita tú.
Irradias felicidad por donde pasas y la quitas cuando marchas sin rumbo fijo con un paso pesado pero ligero.

Tú, magia que provoca guerras y alianzas;tú, que provocas tan sutil fusión de sentimientos,magia;¿dónde estás?Noté que te marchaste de mi lado, ¿a dónde?,¿por qué?, ¿por qué te fuiste sin avisar?
Me dejaste solo contra todo, pero al fin y al cabo ese es tu cometido y este mi destino.

No te deseo la felicidad porque sé que no puedes sentir, tampoco te deseo el sufrimiento porque no lo notarías. Solo deseo que vengas pronto, que allá donde vayas te quedes más tiempo del que estuviste conmigo.
¡Vete! vete si quieres pero si te cansas de aquel capricho que tanto persigues recuerda que yo nunca te olvidé, recuerda dónde estoy, recuerda que te anhelo.

Ánima inherte que llena de vida, esperanza del desdichado, asesina del valeroso; vete pero vuelve. No tardes magia, no tardes amor.